Proyecto para la mejora de la accesibilidad de la comunidad de vecinos.

Cuando un edificio cuenta con un ascensor con un tramo de escaleras previo supone una dificultad insuperable para personas con dificultades de movilidad (silla de ruedas, etc). En esta comunidad, si bien contaba con una silla salva escaleras, este sistema no no da solución a todas las circunstancias, tal y como sucedió aquí, que una nueva realidad hizo que se tuviera que optar por otro sistema más apropiado para todos sus vecinos. La solución pasaba por un elevador salva escaleras vertical con foso.

Para la instalación del elevador hubo que modificar el ancho de la escalera para hacer sitio al nuevo elevador, aprovechando para renovar pavimentos, revestimientos, techo e iluminación de toda la entrada.

Durante los trabajos han sido muchas decisiones que se han debido abordar para conseguir este resultado. Se ha realizado una mella en la escalera original para alojar el elevador, los peldaños se han elaborado en el taller a medida, se ha dotado de una rampa de acceso, hemos planteado una propuesta de iluminación diferente, así como se ha hecho el techo continuo. Todo para dar a esta comunidad una nueva vida con un estilo más actual.

Vives Cerámica fue nuestra opción para esta ocasión. Un porcelánico rectificado de formatos medios apaisados que diera movimiento con pocas juntas.